El azafrán es una especia que conozco bien. Al venir de una familia iraní, era un básico en nuestra cocina, aromatizando desde arroces hasta postres. Cuando me independicé, me regalaron una reserva que duró años; solo una pizca añade un sabor único floral, terroso o ligeramente amargo. Para mí, sabe a hogar.

A nivel mundial, se producen entre 200 y 400 toneladas de azafrán al año, e Irán suministra alrededor del 90%. Aunque es un ingrediente clave en la cocina persa, también se usa ampliamente en platos españoles, italianos y marroquíes.

Aunque antes se consideraba una especia de nicho, ahora el azafrán está apareciendo en todas partes, desde tés y lattes hasta suplementos wellness. (¡Incluso vi un latte de azafrán en una cafetería en Colonia, Alemania!). Con su creciente popularidad, decidí explorar los beneficios para la salud de este favorito de mi infancia. Esto es lo que descubrí.

### Beneficios del azafrán para la salud
El azafrán es conocido por mejorar el ánimo, y no solo por su vibrante color dorado. Estudios sugieren que puede ayudar a aliviar la depresión leve a moderada.

Un estudio señala que el azafrán se ha usado medicinalmente durante siglos en lugares como Irán, India y China. Sus compuestos activos—crocetina, crocina, picrocrocina y safranal—afectan el sistema nervioso, mejorando potencialmente el estado de ánimo, la memoria y la ansiedad.

Pequeños estudios también sugieren que el azafrán puede aliviar el dolor, actuar como diurético y reducir los cólicos menstruales. Otro estudio destaca su potencial para ayudar con la depresión en diversas condiciones, desde el síndrome premenstrual hasta el posparto.

Sin embargo, la nutricionista Astrid Donalies señala que la mayoría de las investigaciones aún son limitadas y se necesitan más estudios. Aun así, dice que vale la pena incluir azafrán en la dieta: "Comer con placer y variedad ya es bueno para la salud".

Un dato importante: los efectos de las especias en casa suelen ser leves, ya que se usan en pequeñas cantidades. "El azafrán es caro, así que normalmente usamos solo una pizca—suficiente para dar sabor y color", explica Donalies. Pero añade que cocinar con especias puede ayudar a reducir el consumo de sal, lo cual es beneficioso, ya que la mayoría de la gente consume demasiada sal.

### Beneficios del azafrán en la belleza
El azafrán también está ganando popularidad en el cuidado de la piel. Gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, se usa en productos antienvejecimiento para mantener la piel saludable y resistente.

Investigaciones muestran que el safranal, un compuesto clave del azafrán, tiene un FPS natural de 6,6. Aunque no es suficiente para una protección solar completa, añade una capa extra de defensa en formulaciones de skincare.

En resumen, el azafrán no es solo una especia sabrosa—también puede ofrecer beneficios para el ánimo y la piel. Y aunque se necesitan más estudios, es una forma deliciosa y aromática de enriquecer comidas y rutinas de autocuidado.

Protección solar con azafrán
Aunque un FPS 15 es el estándar mínimo para protección solar, y el azafrán no es uno de los filtros UV aprobados por la UE, investigaciones muestran que añadir extracto de azafrán a un protector solar FPS 20 puede aumentar la protección hasta un 43%. Esto sugiere que el azafrán podría ser un potenciador prometedor en fórmulas de cuidado solar, aunque no ofrezca suficiente protección por sí solo.

Cómo cocinar con azafrán
El azafrán proviene de los estigmas rojos de la flor Crocus sativus. Al secarse, estos hilos aportan un tono dorado (similar a la cúrcuma) y un aroma fragante, ligeramente amargo y almizclado a los platos.

Para usarlo, tritura los hilos hasta convertirlos en polvo y remójalos en agua tibia o leche durante unos minutos. Esto ayuda a liberar su color soluble en agua y sus aromas volátiles. Añádelo hacia el final de la cocción—ideal para platos como paella, bouillabaisse o risotto. También combina bien con couscous, coliflor o patatas.

En postres, el color dorado y el sabor cálido del azafrán realzan el arroz con leche, la leche dorada o el bizcocho. Combina maravillosamente con vainilla, canela y ralladura de cítricos.

Cómo hacer tahdig persa
Para mí, solo el aroma del azafrán ya es un impulso de bienestar. Por eso me encanta compartir la sencilla receta de tahdig de mi abuela—un arroz persa crujiente y dorado.

Ingredientes:
- Arroz basmati
- Patata, cortada en rodajas finas
- Hilos de azafrán (o polvo), remojados en agua tibia
- Mantequilla

Método:
1. Cocina el arroz basmati como de costumbre, escúrrelo y resérvalo.
2. Remoja el azafrán en agua tibia para liberar su color y aroma.
3. Derrite mantequilla en una sartén antiadherente y coloca las rodajas de patata formando una base crujiente.
4. Coloca el arroz cocido sobre las patatas y rocía con el agua de azafrán.
5. Tapa la sartén, colocando un paño de cocina entre la tapa y la sartén para atrapar el vapor.
6. Cocina a fuego medio-bajo hasta que se forme una costra dorada.

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