De niña delgada y tímida de diez años, toda mi idea de lo sexy se resumía en una mujer: Jessica Rabbit. Era una visión de curvas de reloj de arena y largo cabello rojo peinado al estilo de Veronica Lake, dominando la sala con un vestido rojo sirena y brillante que parecía prácticamente pintado sobre su cuerpo. Y técnicamente, lo estaba.
La ironía de que fuera un dibujo animado de la película de 1988 ¿Quién engañó a Roger Rabbit? no se me escapó cuando crecí lo suficiente para darme cuenta de que su atractivo era una fantasía estereotipada: ese tipo de sexy que volvía locos a los hombres, con los ojos desorbitados y el corazón acelerado, mientras otras mujeres miraban con envidia. Y la niña que fui lo creyó por completo. Jessica Rabbit, el grupo de socorristas en traje de baño de Baywatch, Frederique van der Wal y sus compañeras modelos de Victoria's Secret... todas ellas moldearon mi comprensión juvenil de lo que significaba ser sexy, definido por las reacciones que provocaban en los demás.
Como era de esperar, nunca llegué a ser sexy al estilo "Jessica Rabbit". Incluso cuando mi definición se ha ampliado, pasando de la mirada de los demás a algo más personal y matizado, todavía he luchado por apropiármela por completo. "Lo sexy no es algo que otros te den. Es si tú lo sientes o no", me dijo una vez una amiga cercana. Tiene razón, aunque, por supuesto, cómo nos sentimos a menudo está influenciado por los demás, ya sea una sensación directa de sensualidad o algo que la despierta. Cuando le pregunté qué la hace sentirse sexy, dijo: "Cuando captas la atención de alguien". Lo mismo me pasa a mí. Ser deseada, de verdad, intensamente, aunque solo sea en mi imaginación, me da un mareante subidón de confianza que se siente como algo sexy, aunque solo sea por un momento.
Jennifer Zuccarini, fundadora de la marca de lencería Fleur du Mal, coincide en que la confianza es clave para irradiar una sensualidad interior. Para ella, puede ser tan simple como hacer algo generoso por una misma, como usar una lencería bonita o hacer un buen entrenamiento. "Tal vez te arreglas el pelo exactamente como te gusta y te sientes un poco mejor. Incluso si nadie más se da cuenta, lo hiciste por ti misma y te sientes más segura", dice. "Es un pequeño secreto contigo misma".
Siempre he encontrado profundamente sexy a las personas que desprenden un aire tranquilo y misterioso de seguridad en sí mismas, así que quizás sea hora de que yo misma practique eso. No faltó el misterio provocativo en la pasarela del desfile de Tom Ford para la primavera de 2026, que comenzó con tres modelos deslizándose por la pasarela con gafas de sol oscuras y abrigos de cuero brillante fuertemente ceñidos que brillaban como líquido. Eran increíblemente sexy precisamente por lo que no revelaban, dejando todo a la imaginación. Estas son mujeres que saben exactamente lo que hacen, recuerdo haber pensado. Y, de verdad, lo sabían. Según el director creativo Haider Ackermann, su tarea era seducir sin parecer intencional. Funcionó. Entre el entorno sombrío, la fría indiferencia de las modelos y el talento de Ackermann para crear trajes languidecientes y elegantes, quedé cautivada e inspirada. ¿Por qué no dejar que mi lado tímido se acomode cómodamente en las sombras, donde el encanto no está en lo que digo, sino en lo que me guardo?
Corrientes similares de glamour oscuro fluyeron en Saint Laurent, donde las gabardinas transparentes, las faldas lápiz de cuero y las blusas subversivas con lazo crearon un uniforme para el encanto después del anochecer. Sintiéndome envalentonada, recientemente compré una falda de cuero ajustada vintage de principios de los 80, coincidentemente, también de Saint Laurent. Similar en estilo, pero de un azul marino oscuro como la medianoche, el cuero suave y flexible se siente increíble sobre mis caderas y muslos. Es el tipo de falda que no solo cambia cómo camino, sino cómo me muevo por completo. No me apresuro, merodeo. Más de una vez, me he sorprendido acariciándome la espalda y las caderas, pasando inconscientemente las palmas de mis manos sobre la superficie similar a la piel del cuero. Si el primer paso para sentirse sexy y seductora es seducirse a una misma, entonces quizás estoy más cerca de ese objetivo de lo que pensaba.
En Givenchy, la directora creativa Sarah Burton también presentó varias prendas de cuero, esta vez como vestidos con una sola tirante que caía suelto por el brazo, y una falda estilo sarong combinada con un top sujetador a juego. Pero sentirse sexy requiere más que solo usar cuero; de lo contrario, alguien me habría revelado ese secreto hace mucho tiempo. Entre bastidores, Burton habló sobre cambiar el guion: empoderar a las mujeres a través de arquetipos femeninos, en lugar de aquellos a menudo moldeados por la mirada masculina. La colección tenía una cualidad visiblemente más suave, relajada y sin esfuerzo, con siluetas exageradas que celebraban las curvas femeninas. Burton sabe muy bien que las vidas de las mujeres son complicadas, de muchas maneras, hermosamente complicadas. Esta fue su forma de animarnos a abrazar esa complejidad en nuestros propios términos, libres de la fantasía de otro, para que podamos vivir la nuestra. ¿Qué tan sexy es eso?
Pensé en la filosofía de Zuccarini, su creencia de que la descarga de endorfinas por hacer algo especial para una misma es sexy en sí misma, sin necesidad de nadie más. Y, como Burton expresó a través de sus diseños, vivir una vida dueña de sí misma es profundamente sexy, especialmente por lo deseables que nos hace sentir para nosotras mismas. Imaginarme a mí misma como sexy podría ser tan simple como dejar de declarar que no lo soy.
Siempre he encontrado profundamente sexy a los demás que irradian una sensación tranquila, incluso misteriosa, de satisfacción personal, así que quizás sea hora de que yo misma practique eso.
Preguntas Frecuentes
Por supuesto. Aquí hay una lista de preguntas frecuentes sobre el tema: "Lo sexy no es una apariencia, es una mentalidad: cómo tres colecciones de primavera me ayudaron a encontrarla".
Comprendiendo la idea central
P: ¿Qué significa realmente que "lo sexy es una mentalidad"?
R: Significa que sentirse sexy proviene de tu confianza, actitud y cómo te presentas, no de encajar en un tipo de cuerpo específico o usar ropa de moda. Es una sensación interna que proyectas hacia afuera.
P: ¿Cómo puede la ropa ayudarte a encontrar una mentalidad? ¿No es eso al revés?
R: No necesariamente. La ropa puede ser una herramienta de autoexpresión y experimentación. Probar diferentes estilos puede ayudarte a descubrir cómo quieres sentirte, actuando como un catalizador para cambiar tu confianza interna.
P: ¿Se trata solo de sentirse seguro?
R: La confianza es una gran parte, pero es más específico. Se trata de abrazar una sensación de encanto, alegría y dominio de sí mismo que te resulte auténtica.
Sobre el enfoque de las tres colecciones de primavera
P: ¿Cuáles fueron las tres colecciones de primavera mencionadas?
R: Aunque las colecciones específicas variarán según la marca y el año, el ensayo probablemente las usa como arquetipos:
1. Romántica: Fluida, para conectar con la feminidad y la facilidad.
2. Confeccionada: Estructurada, para encarnar poder e intención.
3. Audaz: Juguetona, para fomentar la alegría y el atrevimiento.
P: ¿Tengo que comprar un guardarropa completamente nuevo para hacer esto?
R: Absolutamente no. La idea es explorar e identificar lo que resuena contigo. Puedes usar prendas que ya tienes, artículos de segunda mano o probarte cosas en una tienda sin comprar. Se trata del acto de exploración.
P: No soy una persona de moda. ¿Esto todavía funcionará para mí?
R: Sí. Esto no se trata de estar a la moda, sino de prestar atención a cómo te hacen sentir diferentes prendas. Estás usando la ropa como un espejo de tu mentalidad, no siguiendo reglas.
Aplicación práctica: Problemas comunes
P: ¿Cómo empiezo si me siento incómoda o tonta?
R: Empieza poco a poco y en privado.
