El siguiente artículo contiene spoilers de **Pillion**.

Han sido unos años algo pervertidos, al menos en la cultura pop y sobre el papel. Piensen en **Saltburn** de Emerald Fennell, **Babygirl** de Halina Reijn, la portada del álbum **Man's Best Friend** de Sabrina Carpenter con su rostro sonrojado. Y ahora, la película debut de Harry Lighton, **Pillion**, un despertar BDSM para la historia donde Colin (Harry Melling), un sumiso de nacimiento, conoce al imponente Adonis dominante Ray (Alexander Skarsgård) y emprende una relación/arreglo de un año. Excepto que, aparte de algo de sexo comunitario de moteros en el bosque y una escena subida de tono con trajes de lucha, **Pillion** es esencialmente una comedia romántica muy clásica y bastante conmovedora. Imaginen **500 Days of Summer**, pero con piercings Prince Albert y uno de ellos durmiendo en la alfombra como un perro. (Ya está disponible en Reino Unido e Irlanda; se estrena en EE. UU. en febrero).

Para quienes esperaban una exploración matizada o transgresora de la experiencia dominante-sumisa, el elemento de "comedia romántica disfrazada" puede resultar una decepción (véase el agudísimo análisis de la escritora Emma Garland en su Substack). Sin embargo, para mí —más que nada un anhelante, y no totalmente reacio a un nuevo giro en una fórmula antigua— fue una sorpresa bienvenida. El espacio emocional entre Colin (que tiene tanto aspecto de un "Colin") y Ray (que tiene tan poco aspecto de un "Ray") es uno de distancia y navegación, de ternura y devoción. Como espectador, te encuentras deseando que lo resuelvan —sea lo que sea ese "lo". ¿Podría Colin conformarse con un poco menos? ¿Podría Ray esforzarse un poco más? La respuesta es no, como suele ser y probablemente deba ser, pero aun así me sentí cautivado por esta bien conocida danza.

Mientras que Melling ha recibido elogios generalizados por su interpretación del modesto Colin (solo hoy descubrí que es Dudley Dursley de **Harry Potter** —oh, cómo han cambiado las cosas), fue Skarsgård en quien no podía apartar la vista (y no solo porque se parece a una estatua florentina). Hay una rareza y un carácter lúdico que Ray emite en pequeñas dosis, haciéndote sentir más sediento que si no hubiera nada en absoluto. Si alguna vez te ha gustado alguien tanto que incluso el mero susurro de una sonrisa se siente como si se abrieran las nubes, reconocerás ese sentimiento replicado en pantalla aquí. Personalmente, no creo que Ray pudiera haber sido interpretado por nadie más. Hay una especie de excentricidad inescrutable que Skarsgård hace tan bien, una generosidad de espíritu detrás de esos ojos de hielo.

Se ha hablado mucho en los últimos años sobre la muerte de las comedias románticas, o el regreso de las comedias románticas, con opiniones "definitivas" que parecen oscilar entre ambas. Creo que nunca más experimentaremos las acogedoras y re-visibles comedias románticas de los 90 y los 2000 porque vivimos en una era completamente diferente. Aparte de lo obvio —el desfile interminable de secuelas y reinicios, una industria con presupuestos ajustados que teme asumir riesgos—, simplemente no estamos culturalmente preparados para esas historias cursis, adineradas, de "chico conoce chica". Siempre tendrán su lugar (el éxito arrollador de **The Summer I Turned Pretty** lo demuestra), pero ya no son la opción automática que solían ser. En ese sentido, creo que las comedias románticas de hoy simplemente lucen diferentes. Lucen como **Babygirl**. Lucen como **Pillion**. Lucen como un hombre inclinado con un delantal de plástico.

Como todas las buenas comedias románticas (véase nuevamente: **500 Days of Summer**, quizás incluso **He's Just Not That Into You**), **Pillion** no termina como tú quieres, sino como debería. Nunca descubrimos de dónde vino Ray, ni sabemos a dónde va, pero Colin surge con una nueva comprensión de sí mismo. Es muy probable que algunos espectadores encuentren esto empalagoso y predecible, pero esa es la naturaleza de una buena comedia romántica. Y, al menos en mi opinión, **Pillion** es una de las mejores de este año.



Preguntas Frecuentes
Por supuesto. Aquí tienes una lista de preguntas frecuentes sobre Pillion en un tono conversacional natural.



Prepárate para Enamorarte de Pillion - Preguntas Frecuentes



Preguntas de Definición para Principiantes



P: Vale, ¿qué es exactamente un pillion?

R: En pocas palabras, un pillion es el asiento del pasajero en una motocicleta o scooter, ubicado detrás del conductor. La persona que se sienta allí se llama pasajero de pillion o piloto de pillion.



P: ¿Es difícil viajar como pasajero en una moto?

R: Tiene una curva de aprendizaje, pero no es difícil. La clave es relajarse, moverse con el conductor y evitar movimientos bruscos. Una buena comunicación marca toda la diferencia.



P: ¿Qué debo usar como pasajero de pillion?

R: Siempre usa el mismo equipo de protección que el conductor: un casco certificado, una chaqueta resistente, guantes, pantalones largos y botas que cubran el tobillo. Vístete para el deslizamiento, no solo para el viaje.



Beneficios y Experiencia



P: ¿Qué tiene de bueno ser pasajero de pillion?

R: Disfrutas de la emoción y la libertad de montar sin la responsabilidad de controlar la moto. Es una forma única de compartir una aventura, ver el paisaje y sentirte completamente conectado con el viaje.



P: ¿Puedo hablar con el conductor mientras nos movemos?

R: Depende de la configuración de tu casco. Sin dispositivos de comunicación, es muy difícil. Muchos motociclistas usan intercomunicadores Bluetooth para poder charlar fácil y seguramente.



P: ¿Cómo subo y bajo de la moto sin causar un bamboleo?

R: Espera siempre la señal del conductor. Monta y desmonta desde el lado izquierdo. Pisa primero el estribo y luego balancea la pierna suavemente. Evita poner tu peso sobre los hombros del conductor.



Problemas Comunes y Seguridad



P: Me pongo nervioso cuando nos inclinamos en las curvas. ¿Qué debo hacer?

R: Mira por encima del hombro del conductor en la dirección de la curva. Tu cuerpo se inclinará naturalmente con él. No intentes sentarte recto o inclinarte en la dirección opuesta, ya que desestabiliza la moto.



P: ¿Dónde me agarro?

R: El mejor lugar es alrededor de la cintura o las caderas del conductor. Si la moto tiene asas o una barra de agarre, puedes usarlas.